Bournonville, Jean de

Maître de musique y compositor

Francés Barroco temprano

Noyon, h. 1585 - †París, 27 de mayo de 1632

Fue director de música en la escuela de coro de la iglesia colegiada de Saint Quentin en 1612, cuando publicó su "Octo cantica".

Catedral de Amiens

Parece haber buscado un puesto similar en Cambrai en 1613, cuando ofreció al capítulo catedralicio de allí un volumen encuadernado de sus misas; ahora está perdido, aunque puede haber sido una primera edición de la "Missae tredecim". Un poema en latín en alabanza a él, impreso en esa colección en 1619, nos dice que había recibido el primer premio en el 'puys de musique' realizado en Rouen, Evreux y Abbeville, y en la página de título es descrito como 'maître de musique' del coro de niños de la  Catedral de Amiens; Fétis informa que había dejado San Quentin en 1618 y había servido brevemente en un cargo similar en Abbeville, antes de trasladarse a Amiens en 1619.

Edición discográfica con una obra de Jean de Bournonville

A fines de 1631 fue nombrado director de la escuela de coro de la Sainte Chapelle, y el 3 de enero de 1632 se instaló allí 'en los sitiales de coro más bajos a mano derecha, no siendo sacerdote'. Que él, como laico, fuese ubicado en tal puesto era un tributo a su categoría como compositor, pero cinco meses después había muerto. Sus contemporáneos alababan su gentil comportamiento tanto como su talento musical, y más de diez años después de su muerte Gantez lo citaba como un ejemplo. Sus alumnos incluyeron a su hijo Valentin y a Artus Aux-Cousteaux. 

Bournonville compuso principalmente música de iglesia a cappella sobre textos latinos para el uso litúrgico -misas, salmos, himnos, antífonas a la Virgen, música de Magnificat y motetes- pero también, en los "Cinquante quatrains", publicó música de adagios morales franceses. Era un contrapuntista excelente y manejaba con facilidad, incluso elegancia,  la escritura imitativa, especialmente en sus misas y en los "Cinquante quatrains": su contrapunto es vivo y espontáneo, y sus líneas melódicas, que son generalmente silábicas, son muy  similares a las encontradas en chansons, especialmente de Janequin.

Las misas en "Missae tredecim" están a veces basadas en un cantus firmus Gregoriano (“Ave maris stella”, “Ave María”, “Heu mihi”, “In nomine Jesu”), y a veces sobre la melodía de una chanson (“Le rossignol”, “Dessus le marché d´Arras”, e incluso "La guerre françoise", que estaba inspirada por "La bataille de Marignan" de Janequin): el último procedimiento infringió claramente los recientes decretos del Concilio de Trento. 

"Ave regina cœlorum"