Todo lo que se sabe acerca de su carrera le asocia con Mantua. En 1580 y 1581 y entre 1601 y 1608 Cantino se desempeñó como organista de la catedral de Mantua, y se sabe que en 1589 y 1590 fue profesor de clericatura allí.

Para las celebraciones del matrimonio en 1581 del príncipe Vincenzo Gonzaga y Margherita Farnese, Cantino contribuyó con un intermedio que se ha perdido; este fue uno de los 'vari e bellissimi intermedi' que, según un testigo, acompañó a una comedia realizada 'con un bellissimo parato et una fortuosissima scena'.

El primer (y único conocido) libro de madrigales de Cantino está dedicado al Duque Guglielmo Gonzaga de Mantua, y en 1588 contribuyó a “L'amorosa caccia” de Alfonso Preti, una colección dedicada enteramente a composiciones de músicos mantuanos.