Liguori, San Alfonso Maria de

Obispo católico, escritor, filósofo escolástico, teólogo y compositor

Italiano Barroco tardío

Marianella, Nápoles, 27 de septiembre de 1696 - †Nocera de' Pagani, 1 de agosto de 1787

Fue el primogénito de siete hijos de Giuseppe Liguori y Anna Maria Caterina Cavalieri, pertenecientes a la nobleza Napolitana.

Alfonso Maria de Liguori

El padre era descendiente de una familia noble, que se estableció en Nápoles, al parecer, cuando la ciudad era todavía ducado independiente. Don Giuseppe siguió la carrera militar. En el momento que nos interesa, 1696, era comandante del equipo que dirigía la cárcel Capitana de la Ciudad y Reino de Nápoles. Dos días después de su nacimiento fue bautizado en la Iglesia de Nuestra Señora la Virgen como Alfonso Maria Antonio Giovanni Cosmas Damian Michele Caspare de' Liguori.  Alfonso Liguori fue a la escuela de derecho de la Universidad de Nápoles a la edad de doce años, y cuatro años más tarde, el 21 de enero de 1713, obtiene el doctorado en derecho civil y canónico, comenzando a ejercer la profesión de abogado a los 16 años de edad, gracias a una especial dispensa virreinal. Una práctica legal de dos años, primero en el estudio de Domenico Caravita, luego con el abogado Jovene, abrió a Alfonso las salas de los tribunales.

En 1710 Alfonso había sido recibido entre los caballeros del Sedile di Portanova, los nobles de la plaza, a los que pertenecían los privilegios y funciones representativas en el gobierno de la ciudad. También son de este período, que se extiende desde 1708 a los primeros ejercicios de la abogacía, dos intentos de matrimonio realizados por su padre. El primero con Teresina de Liguoro, hija del príncipe de Presicce, fracasó en medio de negociaciones entre los padres por la voluntad de la joven de convertirse en monja. Fue, de hecho, monja carmelita y murió santamente en 1724. Más tarde, en 1761, Alfonso escribió una breve biografía suya. El segundo con la hija de Domenico del Balzo, duque de Presenzano, roto por la actitud evasiva de Alfonso. En 1718 obtiene el nombramiento de juez del "Regio Portulano" de Nápoles y, pocos años después, era ya embajador del virrey cardenal Altan.

Sus visitas frecuentes a la Confraternita dei Dottori junto al Oratorio dei Filippini con la asunción del compromiso de visitar y asistir a los enfermos del hospital más grande de Nápoles, llamado degli Incurabili, fueron las ocasiones que le permitieron inclinarse por el camino hacia el seminario. Algunos biógrafos insisten en la descripción de la excelente calidad de abogado defensor, indicando que todas las causas defendidas por el valiente abogado entre 1715 y 1723 fueron coronados por el éxito. Hasta 1723, un año crucial.

Existía un litigio entre el gran duque de Toscana y Filippo Orsini, duque de Gravina, por una suma de 600.000 ducados inherentes a la posesión del feudo de Amatrice, en los Abruzos. Alfonso defendió a los Orsini y fue en su defensa que sufrió la primera derrota. Siguió una reacción agitada y confusa, hecha de angustia, de resentimiento, de disgusto. Pero fue el predominio de un momento. Otros sentimientos entraron en juego mientras la perturbación cedía a la reflexión. A la edad de veintisiete años, después de haber perdido este importante caso -el primero que había perdido en ocho años de ejercicio- tomó la firme resolución de dejar la profesión de abogado. En 1723, después de un largo proceso de discernimiento, abandonó su carrera legal y, a pesar de la fuerte oposición de su padre (y renuente consentimiento), empezó sus estudios en el seminario en preparación para el sacerdocio. Fue ordenado sacerdote el 17 de diciembre de 1726, a la edad de 30 años y, como resultado de un compromiso con su padre, siempre contrario a su elección, no pudo entrar en la Congregazione dell'Oratorio, haciéndose sacerdote diocesano con residencia en la casa paterna.

San Alfonso Maria de Liguori

No limitando sus prédicas a las iglesias, organizò reuniones nocturnas (las llamadas "Cappelle serotine"), convocando  a los fieles más  humildes a quienes explicaba  el Evangelio  de una manera  sencilla  frente a la Iglesia de Santa Teresa degli Scalzi. En  1730 , para  recuperarse de  las secuelas  de  una enfermedad pulmonar fue  enviado  por  los médicos a las alturas  de  Scala e  Ravello cerca de  Salerno donde comenzó  su  labor  de  predicar a  los  campesinos  pobres. En  1732 los 36 años de edaddejó definitivamente  Nápoles para  retirarse  de nuevo  Scala  ( Salerno),  y luego a Villa degli Schiavi, la antigua Sclavia, en la diócesis de Caiazzo, donde fundó  la Congregación  del Santísimo Redentor . La finalidad de esta orden era enseñar y predicar en los barrios bajos de las ciudades y otros lugares pobres.

Alfonso fue consagrado obispo de Sant'Agata dei Goti en 1762, a pesar de que intentó rehusar el nombramiento, argumentando su edad y enfermedades. Durante este tiempo escribió sermones, libros, y artículos para animar la devoción al Sacramento Bendito y a la Bendita Virgen Maria. En 1775 le permitieron retirarse de su oficio y fue a vivir a la casa  de los Redentoristas  de Nocera  de' Pagani (en el lugar que  ahora es parte  de la comuna de  Pagani ),  donde  permaneció  hasta su muerte. Fue enterrado en la basílica de Sant’Alfonso en Pagani.

El 15 de septiembre de 1816 fue beatificado por el papa Pio VII, canonizado el 26 de mayo de 1839 por el papa Gregorio XVI, y después proclamado Doctor de la Iglesia en 1871 por el papa Pio IX. Fue nombrado "Patron de Confesores y Moralistas" por el papa Pio XII el 26 de abril de 1950, quién seguidamente escribió sobre él en la encíclica "Haurietis Aquas".

Alfonso era hábil en las artes -habiéndolo hecho entrenar sus padres por varios maestros de las artes- siendo al mismo tiempo músico, pintor, poeta y autor. Puso toda su creatividad artística y literaria al servicio de la misión cristiana y solicitaba lo mismo de los que se unían a su Congregación. Alfonso escribió 111 obras sobre espiritualidad y teología. Las 21.500 ediciones y las traducciones a 72 idiomas que sus obras han  tenido confirman el hecho de que es uno de los autores católicos más ampliamente leídos. Entre sus obras más conocidas están "El gran significado de la oración", "La práctica del amor de Jesucristo" y "Las visitaciones del Santísimo Sacramento". Su obra musical más conocida es su himno de Navidad "Quanno Nascetti Ninno", después traducido al italiano por el para Pio IX como "Tu scendi dalle stelle"  ("Tú bajas del cielo estrellado").

En el campo de la Mariología, Alfonso escribió "Las Glorias de Maria", "Devoción Mariana, Plegarias a la Divina Madre", "Canciones Espirituales", "La Verdadera esposa de Jesucristo", "Visitacions al Santísimo Sacramento y a la Virgen Maria" y otros escritos.   La mayor contribución de Alfonso a la Iglesia fue en el área de la reflexión moral teológica con su "Teología Moral". Esta obra nació de la experiencia pastoral de Alfonso, de su habilidad para responder a las preguntas prácticas propuestas por los creyentes y de su contacto con sus problemas cotidianos. Sus obras comprenden en total 111 números, suddivididos en obras morales, dogmáticas y ascéticas.

Himno de Navidad "Tu scendi dalle stelle"