Mascitti, Michele

Violinista y compositor

Italiano Barroco tardío

Villa Santa Maria, Chieti, Abruzos, 1663-64 - †París, Francia, 24 de abril de 1760

Michele Mascitti

No hay información documentada sobre su infancia y juventud. Se trasladó a Nápoles, comenzó a estudiar el violín probablemente con su tío Pietro Marchitelli, primer violín (desde 1683) de la capilla real del palacio y en la iglesia de San Bartolomeo. Sobre los primeros años de actividad de M. sólo hay dos documentos, que se remontan al 26 de enero de 1695 y al 5 de marzo de 1697: en ellos M. es mencionado como violinista, contratado junto con Marchitelli, bajo la dirección de Francesco Provenzale. Sobre un presunto estudio de M. con Arcangelo Corelli, no hay pruebas documentales; sin embargo, con toda probabilidad, ambos tuvieron oportunidad de conocerse durante la visita de Corelli a Nápoles en mayo de 1702. Marchitelli consiguió después para su joven sobrino el puesto de ‘violinista supernumerario' en la capilla real con la perspectiva de una posterior permanencia, pero Mascitti prefirió buscar su fortuna en el extranjero. Un poder legal a favor del tío Marchitelli, extendido en diciembre de 1702, permite suponer que por ese tiempo M. se había alejado definitivamente de Nápoles.

Edición discográfica de obras de Michele Mascitti

Habiendo viajado a través de Italia, Alemania y los Países Bajos, se estableció en París. La primera noticia cierta de la presencia de M. en París se remonta a agosto de 1704, cuando se le concedió un privilegio de impresión por ocho años. Pronto llamó la atención del Duque de Orléans, a cuyo servicio entró, y a través de él obtuvo la oportunidad de tocar ante el rey, el delfín y la corte entera. En noviembre de ese año un artículo en el Mercure de Francia hacía notar cómo M. había adquirido una excelente reputación desde su llegada a París, después de haber tenido el honor de exhibirse con éxito en presencia del rey, del delfín y de toda la corte. El mismo artículo anunciaba la publicación de la primera colección de sonatas, que había tenido un excepcional éxito de ventas, tanto que toda la primera edición estaba casi agotada. Mascitti se convirtió en primera figura de la música instrumental italiana en Francia y fue considerado como el igual de Corelli y Albinoni.

En la dedicatoria de la obra M. afirma que sus sonatas ya fueron apreciadas por el duque Felipe de Orléans, mecenas conocido por su inclinación hacia la música italiana, en cuyo servicio M. estuvo ocasionalmente activo. El gran número de copias que han sobrevivido y las numerosas reimpresiones, muchas de ellas no autorizadas, realizadas por Étienne Roger en Ámsterdam y John Walsh en Londres, confirman el éxito del Op. I.

Entre 1706 y 1738 M. publicó otras 8 colecciones de música instrumental. Probablemente el favor conseguido por su música entre el público parisino permitió a M. vivir con sólo los ingresos derivados de sus obras. Esta circunstancia puede explicar la falta de dedicación en las dos colecciones posteriores. Sólo, de hecho, con la publicación de las "14 sonate, Op. IV" (1711) M. volvió a escribir una dedicatoria dirigida al elector de Baviera, Maximiliano II, entonces en exilio en París. La dedicatoria dice que la colección -compuesta de ocho sonatas para violín solo y 6 trío-sonatas- había sido encargada por el mismo príncipe.

El 7 de abril de 1714 M. obtuvo una renovación del privilegio de impresión durante otros quince años. El mismo año publicó la colección de sonatas, Op. V, dedicada al cardenal Pietro Ottoboni. Es posible que con esta obra M. tratara de congraciarse con el famoso mecenas y, tal vez, aspirase a ocupar el puesto dejado vacante por Arcangelo Corelli, que murió en 1713, ya al servicio del mismo cardenal.

Retrato de Michele Mascitti por Marie-Anne Doublet

Poseyendo la ventaja sobre sus compatriotas de la residencia en París, Mascitti disfrutó de una popularidad enorme entre el público francés, entre quienes era afectuosamente conocido por su nombre Michele en varias formas afrancesadas: Michel o Miquel. En los Países Bajos e Inglaterra, donde su música fue reimpresa extensamente, su reputación era menos excepcional, aunque también considerable.

Ocho años separan la publicación del Op. V de la siguiente. Aunque no hay rastros de su actividad en este periodo, se puede suponer que M. participase como virtuoso del violín en la animada vida de conciertos de la capital francesa. Algunas de sus composiciones, probablemente, fueron ejecutadas en la famosa serie del Concert spirituel o en la del Concert des Mélophilètes. Un rastro indirecto de esa actividad se encuentra en la colección del Op. VII (1727), cuya segunda parte contiene cuatro 'concerti grossi', a llos que se debe, al menos en parte, la fama de M., siendo éstos los primeros de su tipo publicados en Francia.

En estos años, M. también entró en contacto con los hermanos Pierre y Antoine Crozat, miembros de una rica e influyente familia de financistas. El 26 de enero de 1731 M. obtuvo la extensión del privilegio de impresión por otros ocho años. Ese mismo año publicó la colección Op. VIII, en cuya dedicatoria canta las alabanzas de 'Madame Crozat' (probablemente Marie-Marguerite, esposa de Antoine Crozat). La última colección de sonatas de M., publicada en 1738, está dedicada a Louis-François Crozat, marqués du Châtel, hijo mayor de Antoine y heredero de todos sus bienes. En la dedicatoria M. alude a su papel como maestro de música de la hija del dedicatario, Antonieta-Eustachie, lo que confirma el hecho de que los Crozat se habían convertido en sus principales clientes; en esa época alojaba en la casa de Pierre Crozat.

El 30 de diciembre de 1739 M. obtuvo la ciudadanía francesa, adoptando el nombre Michel con que desde hacía tiempo era conocido en París. Unos meses más tarde se casó con Marie-Anne Labattue (aproximadamente 1693-1769) y tuvo como testigos de la boda a varios miembros de la familia Crozat. A pesar de que el 12 de julio de 1740 le había sido renovado el privilegio de impresión por otros doce años, M. pasó los últimos veinte años de su larga vida lejos de toda actividad musical. M. murió en París el 19 de abril de 1760 en la casa de los Crozat, a la edad de noventa y seis años.

M. ocupa un papel crucial en la difusión de la música italiana en Francia a principios del siglo XVIII. El extraordinario éxito de público logrado principalmente por las primeras colecciones se basó en la imitación del Op. V de Corelli que M. tomó como modelo casi en una la cita explícita. La simplicidad y el modesto contenido técnico de las sonatas impresas no reflejan las extraordinarias cualidades de virtuoso por las que fue admirado por el público parisino, ya que estaban destinadas a un público aficionado. En algunos casos, sin embargo, las sonatas muestran un nivel técnico sin duda más avanzado respecto del modelo coreliano, como se ve, por ejemplo, en el Largo de la Sonata op. III N° 8, realizado enteramente en dobles cuerdas. Aunque en la premisa del Op. II M. declara explícitamente que ha intentado una conciliación del gusto francés con el italiano, pocos son realmente los rasgos atribuibles al estilo francés.

En las primeras décadas del siglo XVIII, las composiciones de M. entraron a formar parte permanente del repertorio musical en Francia: virtuosos, como los violistas Antoine y Jean-Baptiste Forqueray, el famoso violinista Jean-Pierre Guignon y el flautista Michel Blavet, a menudo ejecutaban las sonatas de Mascitti. En 1713 un artículo aparecido en el Mercure Galant consideraba las sonatas de Corelli, T. Albinoni y M. entre los ejemplos más sublimes del género. Un chacona de M. se insertó en el intermezzo "Serpilla e Baiocco" de Giuseppe Maria Orlandini, representado en París en junio de 1729. La fama de M. aún estaba viva en 1802 cuando Jean-Baptiste Cartier incluye en "L'art du violon" el Larghetto de la sonata Op. VIII N° 2.

Las 116 obras impresas de Mascitti son para cuerdas; 100 son sonatas solistas (casi exclusivamente de la variedad 'da camera', mostrando una mezcla juiciosa de elementos franceses); 12 son sonatas de trío; y cuatro (Op 7, Nº 9-12) son conciertos de diseño más bien Corelliano, que cuando aparecieron en 1727 fueron los primeros conciertos de cuerdas de un compositor residente en Francia en ser publicados allí. Las obras publicadas de Mascitti ofrecen una reproducción competente del estilo retocado luminoso de Corelli para complacer el gusto francés; sin embargo, es probable que la música que escribió en París para ocasiones especiales (por ejemplo la chaconne en el tercer acto del intermezzo "Baïocco") habría mostrado, si se recuperara, que podía usar un estilo francés más verdadero cuando se requería.

1° movimiento del "Concierto para seis instrumentos N° 3, Op 7"