Luego trabajó en San Bavo en Haarlem durante los tres años siguientes.

Sólo nos ha dejado un libro de sonatas, titulado "Sonate per il cembalo appropriate al Flauto & Violino", publicado por Hendrick Anders en Amsterdam en 1690. Se reimprimió veinte años después por Etienne Roger con un título más específico: "Mélange italien ou Sonates à une Flûte & Basse continue, à un Violon & Basse continue, à 2 Violons sans Basse & à un clavessin seul". La cuarta y última piezas de la colección son probablemente las primeras sonatas escritas para clavicordio. Están escritas con bajo figurado, indicando que también podría ser tocadas por un instrumento tiple con continuo.

François Sabatier describe sus movimientos continuos como sigue: "La Sonata en Sol menor de Sybrand II, concebida en un lenguaje muy alejado del de principios de siglo, se parece a lo que Buxtehude estaba escribiendo en el mismo periodo: una pieza limpiamente dividid y barroca, que comprende dos partes en un estilo de fuga italiana a la que responde un exordio, un interludio y una peroración, de una manera declamatoria".